Por Manuel Araníbar Luna.
Antes de la contienda surgió un tímido amago de sol, digamos unos diez céntimos. Más calor había en la tribuna debido a que volvíamos a la Fortaleza Celeste. La hinchada llenaba las graderías con el ánimo de siempre a ponerse la número 12.
Calentar antes de ruletear…
El equipo entró algo
timorato, tibiecito, con las piernas algo duras, como carro al que hay que
calentarlo antes de salir a ruletear. El Che Farré abrió la portezuela, chequeó
la gasolina. Tanque semilleno. El aceite OK. Las llantas infladitas. ¿Carrocería?,
lavadita. Faros y espejos retrovisores, como recién comprados, libres del robo
por parte de pirañitas. Giró la llave, y el motor encendió. A ver, dijo Farré, vamos
a esperar a que la máquina se caliente. Bien, el partido arrancó y los celestes
no salían. Era que los rosados les bloqueaban el portón de la cochera.
El motivo era que el
cervecero entraba formado como para jugar de visitante, con chalecos antibalas,
pero sin alguien que reparta las municiones. Los tres volantes no armaban, sólo
contenían. Eso está bien cuando uno va a jugar de visita. Pero de local, delante
de toda tu gentaza que te recibe con ovaciones, palmas, cánticos, globos, pica-pica
y niebla celeste no puedes salir sin alguien que te arme por lo menos una
pistola hechiza para los sicarios de la vanguardia. Momentos hubo en que los
celestes no asomaban ni para ver si estaba lloviendo: pasecito de Enríquez para
acá y regreso para allá, ¿pero palante?, naka. Solitario y marcado al
milímetro, el Killer se moría de hambre. Más bien, los rosados llegaron un par
de veces a la línea de cuatro en la que Pósito tenía la difícil tarea de
reemplazar a la Muralla Ignacio.
El Killer mata primero…
Sin un armador neto, los escasos
ataques cerveceros salían por los flancos, en donde los dos pericotes eran
vigilados por dos y hasta tres guachimanes rosados para cada uno. Así no alcanzaba
ni para un caldo sin presa. No obstante, Santi y Joao, escurridizos y bien
engrasados, de vez en cuando se daban sus escapaditas. En su primera llegada clara,
tras un lanzamiento de bombarda desde la derecha. Llega el dron a la candela,
el arquero rechaza de puñete. Para su desgracia la pelota cae al chimpún de
Santi que
mete el buscapié, Gianfranco salta y la deja pasar y el Killer solo la empuja y lo celebra con furia. 1 a 0.
Cambia
el tablero electrónico pero Cristal sigue jugando retrasado al estilo visita. Para algunos es cuidar
el marcador hasta que termine el primer tiempo. Para otros, es invitar a
que el rival se mande con todo y así contragolpearlo. Dicho y hecho, cuando Lorita
se escapa y se la juega a Santi, este quiebra a su guachimán y se manda solo al
arco pero la bola sale a tomar un emoliente. Santi se rasca la cabeza como si se le hubieran subido las hormigas. No te desesperes, Santi, ya llegará el tuyo.
Segundo
tiempo.
Empezando
el segundo Paul McCartney recién arranca la máquina celeste. Ya el motor está
caliente a pesar del maldito frío digno de Challapalca. Palanca en primera, ¡y
a ruletear se ha dicho! El partido se pone de dame que te doy porque los guachimanes
porteños quieren empatar y han soltado a los pericotes. Se agradece. El Killer
se escapa y se la sirve a Santi que driblea a Rivadeneyra pero la bola se
resiste a entrar al telo sin siquiera darle un beso. Paciencia, Pericotín, ya
llegará tu gol. Los celestes siguen perdiendo goles y eso exaspera a la
hinchada. Hay temor del famoso dicho “goles que no haces…”
El
futbol es para los vivos…
Cambio
en la celeste: Ahora sí hay lanzamientos y envíos con motorizado de Távara y
armado con mucha movilidad y penetración del asiático Jostin quien recién
entrando se pierde un gol. Ganas, alegría y dribling tiene de sobra el chino, lo que le
falta es puntería. Pósito -que no lo hizo mal- sale lesionado y lo reemplaza el
flaco Rafa Luti. Joao hace una travesura por la izquierda evitando el pan con pejerrey, Pasquini le gana el vivo al marcador y la alcanza, mete el buscapié.
Killer, para no ser menos, le gana el vivo a otro rosado y la mete suavecita. 2
a huevo. No hay nada que hacer, el futbol es para los vivos.
Santi
la está rompiendo, pero no le liga ni unita partida por la mitad. Hasta que por
fin se le aparece la Virgen. Centro desde la derecha. La peina Luti, y la
chancha da un botecito de canguro para Santi que esta vez no perdona. La pesca
de media vuelta, le da con alma corazón y vida y embaraza la valla. Y vaya que
está furioso. Su gol lo grita con tanta rabia que le mete un cabezazo al banderín
del córner. Que si la bola no entraba, ya
lo estaban esperando con camisa de fuerza en el camarín.
Peinado al estilo Di Caprio…
Ya
en los descuentos, con tres goles y los tres puntos en el bolsillo, la gente se
va quitando satisfecha por el triunfo, aunque falta el guindón de la mazamorra.
Otra vez centro desde la derecha lanzado por el Chévere que ha regresado con ganas.
El dron viene con curva de plátano bellaco a la mitra del flaco Luti, y este la
peina con rayita al estilo Leo Di Caprio. La pelota se escabulle sesgada y con
ese 4 a 0 la máquina celeste hunde a la misilera. Buenas noches.
Coda
Aviso: Quien tenga la foto de Santi dándole un mitrazo al banderín del córner que por favor la suba.
ESTE RESULTADO ES ENGAÑOSO. ESA DEFENSA DE LOS GANZOS LOS HA AYUDADO Y EL ARBITRO TAMBIEN. EL VERDADERO POTENSIAL SE VA A HABER CUANDO ENFRENTEN A LOS CUSQUEÑOS. AHI QUIERO VERLOS MIENTRAS TANTO LOS PAVOS NO SON NADA
ResponderBorrarseñores de la esquina saquen a esta gayikagona como permiten que nos falten el respeto les duele que les hemos ganado finales a las gayinas y a los cagones mucho peor porque que les hemos ganado las final mas facil nunca se van a olvidar 7 a 1 y los cusqueños que no se burlen mucho porque les hemos ganado finales en su cancha
Borrarque haces aqui oye tarado que entras a paginas celestes. lo haces por envidia, por odio, por piconería por haberles ganado títulos en su propia cancha. como dice marc antony, muy tipico de gayinas , cagones o cusqueños, de todos modos ni nos interesa. largate a escribir huevadas en las paginas de tu equipo baboso
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