Por Manuel Araníbar Luna
Ya no era momento de
lamentar la derrota por la Sudamericana. Ese triste resultado- dijeron los muchachos- ya
fue. Ahora hay que jugar en tiempo presente, y acumular puntos para el futuro.
No debe faltar el picante…
No anheles impaciente el bien futuro:
mira que ni el presente está seguro.
Desde la derrota ante
el Emelec todo el pueblo celeste tenía la sangre en el ojo. En la interna los
jugadores y cuerpo técnico no se explicaban que había pasado, pero Nunes chapó la mota y borró la pizarra:
—não há tempo para
chorar pelo leite derramado
No, no se trata de chorear
pelo, Nunes quiso decir que no hay tiempo para llorar sobre la leche derramada.
Los celestes salieron a
la cancha (o entraron, igual da) con mucha confianza en el triunfo y algunos
refrescos— Alejandro al flaco de portero, Pasquini en la zaga en línea con el
Lobo, Rafa y Nacho. Pretell, Yoshi y el chino Jostin en el medio. A la
vanguardia Irven, Alejandro el chico y la Manchita Corozo. Un
equipo parchado con pega—pega (cuyo nombre técnico es velcro). En esto no hay
mucha ciencia, Así lo plantean casi todos los técnicos: arranca el partido y según como vaya el cau
cau le quitas ajos y le pones cebollas, pero no debe faltar el ingrediente
picante, sea ají limo o rocoto.
Primer centro del tío
Nico y gol…
No obstante, a los
rimenses el tiempo presente sólo les cubría la mitad del cerebro, la otra mitad era el
futuro, la revancha en Guayaquil, por ello —tal como en el partido contra los
del otro lado del zanjón— entraron a no arriesgar, a no sacrificar las piernas
de zarpazos y guadañas. Había que jugar a media máquina para que no suceda lo
que a Lorita que tuvo que descansar con la pierna en baño maría porque contra
el equipo electricista terminó abollado.
Se elaboraba y se
llegaba de modo intermitente. El tío Nico Pasquini que estuvo unos cuantos
minutos contra Emelec quería impresionar en el Gallardo con algo digno de
recordar por el hincha. Y la ocasión se le presenta listita y bañadita bailando tango en
tanga. Dispara el centro al horno con curva de Pasamayo directo para Manchita que
la mete como si sacudiera la mitra para sacarse agua de la oreja. 1 a cero. Los
trujillanos reclaman posición adelantada, pero naka, un azulejo se ha quedado enganchado
y deja en ficha de casino a su línea de retaguardia. Se está ganando por
iniciativa.
Soñando despiertos…
Así cantaba Héctor
Lavoe. Los rimenses habían sufrido insomnios y pesadillas desde la derrota por
la Sudamericana. Obvio, si no durmieron bien tenían que tener algo de awebamiento. Este letargo se percibe en
los centros al área rimense. Se demoran en saltar, y eso que Nacho y Rafa pasan
del metro noventa.
Adelante, los celestes siguen elaborando y llegando. Alejandro
el chico mete tremendo gol de aguilita tras un centro del hombre Lobo. Anulado
por offside. El tío Nico ya estaba chino de alegría por su centro—pase para el
gol pero luego tras recibir una pelota de Washington se pierde un gol por rematar
con la coja. La pelota va a enjuagarse al río. No te preocupes tío
Nico, la hinchada comprende, ya la meterás.
Pero llega el empate
tras un corner desde la izquierda. Todos los celestes cuidan a los delanteros
trujillanos más altos, y ni siquiera se precupan del más chaturri, quien la
mete de cabeza. ¿No les decíamos que estaban medio somnolientos? 1 a 1. Ahora
sí que cabezinha branca se achora y se cuelga de la nariz en el
alambrado.
— por
todos os demônios do inferno, como vocês podem se esquecer de ficar de olho no
menor de todos eles!
Por su parte Hohberg
tras la anulación de su gol de aguilita jura no fallar otro gol. Quiebra con la
derecha y remata con la zurda. Excelente jugada, pero piña al cubo, la bola da
en el tronco. Los norteños también tienen lo suyo, rematan de shot y de mitra
pero también han dejado la puntería en Trujillo. Así se van al descanso.
Lesiones, calambres y
desmayos…
Al retorno, Pretell que es una fiera defendiendo, una malla de alambre de púas bloqueando, un bombero sofocando incendios y un mecánico reparando fallas, no mide la distancia. Por rechazar una pelota patea a un delantero azul. Un hecho casual pero Michael dice que es penal. 2 a 1. Los azulejos, que han venido a buscar un empate se encuentran volteando el partido. Todo esto les parece un sueño tan encantador que se han olvidado de comer. Por venir demasiado rápido a Lima han llegado en ayunas desde Semana Santa porque luego de su gol unos se lesionan, otros se acalambran; por ahí otro se tropieza con una hormiga y se le dobla el tobillo; Heredia se atortuga cda vez que hace un saque de arco. Casi todos se desmayan de pura debilidad.
Aviso importante para la dirigencia del Mannucci: antes
de traerlos a Lima alimenten a sus jugadores con su pan con torreja y una maca
con quinua de a sol porque los pobres muchachos están tan débiles que se caen
solos. Habrá que examinarlos. Fijo que están anémicos.¿Resultado? Michael, cosa
rara en él, señala su Rolex indicando que va a aumentar minutos.
Guarden los abrazos
para su santo…
Los celestes atacan por
todos lados, mientras los minutos pasan con la lentitud de caracol y los azules
se atrincheran. Hohberg vuelve a perderse otra que la manda hasta el Trébol. En
vista que está jugando con tan mala puntería Nunes lo saca y mete a Brenner.
Aplausos de la hinchada. Al poco rato lo jalan de la camiseta en el área al 9
brazuco y el árbitro sopletea penal. El carioca recibe el encargo. Se acerca a la
bola bailando batucada y la chotea al
lado opuesto donde se lanza Heredia. Brenner no celebra y se la lleva corriendo
al centro del campo porque cada minuto cuenta, y pide que los abrazos los guarden
para su cumpleaños con torta y feijoada.
Bien, ya empataron.
Ahora hay que voltear la tortilla que se está quemando en la sartén. Hay que
triangular y meter centros. Entra el chévere Távara, Joao, Ascues y Medina. Ya
están todos los cambios y los otros que estaban calentando, por favor vayan a
la banca y no estorben ni distraigan a los que están en cancha que ahorita
llega el gol.
¿Ahorita? Una cosa es
decirlo y otra hacerlo. Se cumplen los 90’ y Michael le aumenta siete minutos,
aunque con tanto lesionado, camillero, doctor y frotación por lo menos tenían que dar tres más. Pero bueno, el partido está picante y no hay tiempo para discutirle a Michael. Ascues se lesiona, pero de puro
valiente se queda en cancha. Qué bien, Adriancito, tienes sangre celeste. faltam dos minutos. Apúrense
muchachos que hay que meterla.
Uma tesoura de
jardinagem…
Faltando un minuto,
Yoshi se mete por la derecha y la saca para Medina. Este no la piensa, la orden es meterla a la mandarla a la olla como sea. Y bien, la manda pues, a
media distancia y a media altura, muy retrasada para pararla de pecho, muy baja
para cabecearla, y muy alta para pararla. Además, hay dos jugadores marcando a
Brenner. Pero los arietes son así. Brenner se abre paso para meter el zapatazo, una tijera de jardinero (en portugués, uma
tesoura de jardinagem) que menos mal que le da a la bola, que si no la
pescaba le rompía una costilla a un marcador azulejo. 3 a 2. Ahora sí el Caremalo
Brenner grita tan fuerte que se asustan los gallinazos. Abrazos, pirámide
celeste y locura en la tribuna.
A ver, quisiéramos escuchar
qué opinan ahora los aguafiestas, los revientahuevos, los que pedían su rescisión.
No se oye padre, porque los cánticos de los barristas tapan toda opinión de los
pesimistas. Buenas noches.
Fuerza cristal carajo. Ahora a ganar en Guayaquil
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