viernes, 23 de julio de 2021

GRACIAS PIKI, BIENVENIDO PROFESOR CAZULO

 Por Manuel Araníbar Luna




La noticia remeció las esferas celestes, retumbó en los cerros del Rímac y su eco se prolongó desde los conos hasta todos los rincones del país celeste. Piki regresa. Es que Piki no se fue, salió sólo por un ratito. Ya no vestirá de corto ni de overol y ya guardó su caja de herramientas. Hoy regresa como el profesor Jorge Luis Cazulo con el buzo de DT y el tablero de notas que los huachafos llaman clipboard.


El apóstol de la barba…

Hasta el pasado diciembre, luego de obtener su quinto título con los celestes, Jorge Luis Cazulo era conocido cariñosamente como Piki, el Pequeño Gladiador, P-23, Piki el Guerrero, Piki Tres Pulmones, Piki el Tractor, Piki el Tanquecito, Piki el Hiperactivo, Piki el apóstol de la barba, Piki el Apagafuegos y, uf, todos los apelativos con los que se califica a un jugador batallador y vehemente, aguerrido y tenaz.

Hoy tenemos que darle las gracias nuevamente a Piki que regresa como el Profesor Cazulo, director técnico del plantel de la Reserva cervecera. No obstante, Piki, perdón, el profesor Cazulo, también le echará un ojo a los niños y adolescentes que destaquen no sólo por su habilidad con la pelota sino por su guapeza, por sus sanas costumbres y por su mentalidad ganadora.

Bienvenido profesor…

Suena bacán llamarlo profesor Cazulo. Porque lo merece. Porque un profesor, un maestro, predica con el ejemplo. Se sabe que el mejor entrenador es que enseña, el que moldea, el que ubica al jugador en su posición más idónea, el que corrige las imperfecciones, el que pule los diamantes en bruto, el que da libertad al jugador para que se desarrolle. Y claro, un Director Técnico no va a estar soplándole el oído “rómpete el alma por tu equipo” a un jugador que ya recibe sueldo profesional y al que se le paga para que se rompa el alma por su cuadro y no para que juegue como en pichanguitas de barrio. El temperamento nace con el futbolista, pero se desarrolla teniendo al frente a una figura que le transmite energía y actitud como lo hace Piki, perdón, el profesor Cazulo. Bienvenido profesor…

Es justo y necesario…

Hasta diciembre del 2020 Piki era el gladiador, el que las peleaba todas, el que corría todo el campo en la mayor altitud y terminaba con aire para jugar 45 minutos más. Desde hoy será el que les dé la transfusión de desawebina forte con el lema cervecero “Otros disputan partidos, nosotros disputamos campeonatos”.  Y se lo merece porque, como dice el cura de la parroquia, “es justo y necesario”

Justo porque Piki ha demostrado que el cargo lo merece por mérito propio. Durante las nueve temporadas que defendió la celeste fue un líder y un segundo DT dentro del campo. Guapeaba a quienes no ponían el pie con decisión, gritaba a los pusilánimes, palmoteaba a los debutantes y empujaba al equipo cuando las energías decaían.

Y necesario porque los muchachos requieren un espejo en dónde mirarse. Piki llegó a La Florida como volante por derecha y Mosquera lo sembró, lo regó, lo podó y lo cosechó como 6. Lejos de molestarse, Jorge Luis se dedicó a observar el modo de ubicarse, presionar y contener de los volantes centrales de todos los equipos. Se lo propuso y lo logró con tal tino que fue considerado el mejor jugador del 2012 en su puesto, el mejor extranjero y mejor jugador del campeonato. Casi nada.  ¿Cómo no va a ser necesaria, entonces, la presencia de Piki, perdón, el profesor Cazulo?

El premio: La 23…

Este año ningún cervecero ha salido a jugar con el número 23. Ese número -al igual que el 27 de Loba- es sagrado, tiene dueño, es inembargable porque aún nadie se lo ha ganado. La tarea de Piki es hallar al jugador celeste que se gane la 23 a punta de tesón y de raza. ¿Lo logrará alguno? No depende de Cazulo, depende del jugador que la merezca. Y créanme que Piki, digo el Profesor Cazulo, no va a parar hasta encontrar no sólo a uno sino a varios que se peleen por llevarla con orgullo. Con el tiempo veremos una foto de Jorge Luis entregando la número 23 al jugador que se haya ganado esa joya. Se nos ha ocurrido una idea motivadora. Que todos los años el club otorgue como premio la “23” al jugador celeste que se destaque por su actitud, por jugar al estilo Piki. Por ejemplo, este año el ganador de la 23 será… disculpen, ejem, aún no vemos a nadie a la vista. Además, esa es la tarea de Piki, perdón, del profesor Cazulo.

2 comentarios:

  1. SALUD CAZULO EL MAS MACHO DE LOS CAMPEONATOS PERUANOS DESDE QUE SALIO CAMPEON EL 2013 <3 <3 <3 <3

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    1. Aida estas en un error Piqui Cazulo ha campeonado cinco veces cada dos años. 20212, 2014, 2016, 2018 y 2020. No campeonamos el 2013 por culpa de la dirigencia mafiosa que sacó a Mosquera a medio campeonato y no tuvieron la valentía de dar la cara. Trajeron a cojos como Zlatan que llegó quemado y el Rayo un uruguayo de equipo de barrio. Se llevaron la torta completa y no dejaron ni para el te.

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