CAMPEONES CON DOS LISURAS DE LIZA

 Por Manuel Araníbar Luna

Desde que saltó la noticia de la falla de la iluminación en el estadio de Matute, el hincha celeste presentía que algo se estaba cocinando en el fogón para crear la conocida ansiedad pre—partido. Pero al frente del comando estratégico cervecero, el profesor Mosquera está preparado para estos menesteres y lo tomó como anécdota, aunque no se calló. “Qué falta de seriedad. Las finales se juegan en el Nacional”, declaró visiblemente mortificado.

El mismo libreto…

Y es que al alargar el precalientamiento a dos horas se crea un desgaste físico adicional, teniendo en cuenta que está dentro de lo previsto que en caso de empate se podría jugar tiempo adicional de 30 minutos (15 + 15)  más penales. Por ello, esas horas de calentamiento restan físico. No obstante, la tensión pre—partido afectaba mucho más al equipo norteño porque no jugaba una final desde hace una punta de años.

Bien. Durante todo el primer tiempo los celestes no lograban armar juego porque el DT del equipo liberteño imitó el libreto de todos los equipos nacionales que enfrentan a los celestes, es decir poblar el medio campo, tapar las salidas por los flancos y esperar un error de los celestes para contraatacar. Consiguió su objetivo a medias. Es cierto que bloqueó el armado celeste en el medio campo, también es cierto que tapó las salidas por las bandas, pero no atacó, salvo un par de disparos que se diluyeron como sal en el agua. Alejandro el Flaco ni se ensució los guantes. En el lado celeste los errores se sucedían tanto en salida como en armado y ataque. Al igual que el equipo adversario, salvo un par de disparos de mediano peligro, cero balas. Así se fueron al descanso.

Champú y moco de gorila…

En el camarín el Dt Mosquera les lavó la cabeza con shampú con ají limo, en vivo y en directo y sin guardarse nada en la alcancía.

—Muchachos, esta no es una pichanga entre solteros y casados, esta es una final y los celestes estamos acostumbrados a pelear finales. ¿entendieron?

Claro que lo entendieron. Con la cabeza lavada con champú fino y peinada con gel de moco de gorila los celestes entraron a ganar o morir en el intento. Mosquera sacó a Marchán que se fue marchando antes del desfile y metió a Liza que entro a amargarle la vida a los dos centrales trujillanos. La alegría de jugar y las ganas de ganar hicieron un coctel de futbol rimense en modo “Alameda de Los Descalzos”. Bastaron unos cuantos minutos de ataques bajopontinos para que los backs azules se dedicaran a meter taba en la cercanía de su área. Las entradas por las bandas se hicieron más dañinas. Alejandro el Chico se mete por la banda izquierda y desde la línea final lanza un centro venenoso al segundo palo donde la pelota es pivoteada por Irven Beybe y Liza la pesca con la mocha en las narices de Heredia y la mete al fondo de la canasta de papas. 1 a 0 gracias a la lisura de Liza que hace reaccionar al equipo liberteño. Su entrenador manda más gente al ataque, lo que facilita los contragolpes cerveceros.

He ahí la diferencia…

 Sin embargo, en una inofensiva entrada por la zurda Felucho choca con Gianfranco y se cae solito, pero convence a Ordoñez de que es penal. En la repe se nota que no lo es, los jueces sapos de la línea del córner miran para otro lado y el tremendo juez insiste que es tremendo penal. El comentarista Rebagliatti ha visto otro partido porque es el único que le da la razón. 1 a 1.  Los azules celebran, pero la alegría no les dura más que un minuto. Se les lee el pensamiento su deseo de adormecerla para ir al alargue y a buscarse los frejoles en los penales, mientras que los cerveceros atacan para ganar, he ahí la diferencia.

Otra lisura de Liza

De inmediato, mientras los azules siguen celebrando, Calca lanza una bomba al cráter. Un defensa liberteño la desvía mal y Ávila en vez de meterse por la derecha prefiere jugársela a Liza que ha entrado por el centro con hambre de ganarse el titularato a punta de goles. Y Liza tiene la segunda lisura de la noche al meterle tremendo petardo del cual Heredia sólo siente el zumbido que rompe la red. 2 a 1. Pirámide celeste pese a que no ha jugado el faraón. ¿Y luego? Mosquera, más ducho y más experimentado, termina de darle un duchazo de agua helada al partido. Congela las acciones y mete jugadores para tenerla, adormecerla y hacerla dormir cantándole arrorró mi gorda.

Se presentan más contragolpes como para terminar de rematar pero los celestes no son abusivos. Ordoñez pita su flauta de afilador y dice chau. Cristal es campeón del Bicentenario y el resto son saltos, gritos, cánticos y medallas doradas. Gracias Profe Mosquera. Gracias muchachos. Buenas noches.