Por Manuel Araníbar Luna
"La bola es una gorda traicionera,
se mete por donde uno no la espera"
Una
división: 11 ÷ 2 = 5.5…
Y esto pasaba en ambas vallas.
Bastante chamba tuvieron ambos goleros y ambas líneas defensivas. Muchas pelotas de gol desperdiciaron los definidores que habían dejado
la puntería en el camarín. El partido poco a poco fue acelerando hasta los
60. Un par de pelotas perdidas en salida
casi se meten en la valla de Penny. El once jugaba partido en dos, se había convertido en dos mitades de cinco y
medio porque Cazulo jugaba pegado a los
centrales y con ello se descuidaba la zona de contención. ¿Quién quitaba al
medio? Que se sepa, Loba y Calca de vez en cuando quitan bolas pero aún no han
obtenido título académico de perros de presa. Para peor, Calca puso la pierna
fuerte y con ello se ganó la amarelha. Con esa tarjeta ya no pudo contener la
generación de ataques de los locales. Adelante Irven andaba escondido, un
tanto retrasado para salir con bola jugada, esperando que se adelanten los
centrales de los wankas. Los de atrás como hace varias fechas, las mismas fallas de siempre, indecisiones y descoordinaciones
en los relevos.
Irven agradece el regalo…
Para el segundo tiempo ya la
cosa se ponía más seria que un infarto.
Faltaban 45 y había que anotar. Pasaban los minutos y nada de nada en
medio de la nada. El partido entonces se puso de ida y vuelta, de dame que te
doy; ambos equipos se perdían goles por rochosas fallas de defensa. En una de
ellas, Chapita con la piconería clásica de los orientales, después de tres
intentos fallidos, antes de que el soroche lo ahogue se mete al área remata y
Pinto que se la saca con el chimpún, la
bola pica de frente por la puerta de la sala como un obsequio para quien la
pesque.
A Irven, como buen huanuqueño, muy cortés, no le gusta despreciar los donativos. ¿Qué iba a hacer, entonces, con tamaña pelota que el arquero se la estaba regalando envueltita en celofán? Agradeció nomás, y de inmediato metió un tabazo que pasó como bazooka entre tres jugadores pegados a la raya que ni la vieron, sólo sintieron el zumbido del bólido que pasaba por sus narices. Y es que el Irven con la derecha mata y con la zurda remata, siempre la mete como venga y por donde venga. Y con ello hizo las paces nuevamente con el arco.
A Irven, como buen huanuqueño, muy cortés, no le gusta despreciar los donativos. ¿Qué iba a hacer, entonces, con tamaña pelota que el arquero se la estaba regalando envueltita en celofán? Agradeció nomás, y de inmediato metió un tabazo que pasó como bazooka entre tres jugadores pegados a la raya que ni la vieron, sólo sintieron el zumbido del bólido que pasaba por sus narices. Y es que el Irven con la derecha mata y con la zurda remata, siempre la mete como venga y por donde venga. Y con ello hizo las paces nuevamente con el arco.
Ya el partido se pone a 120
por hora. ¿Aguantarían los rimenses? Difícil, porque a jugador que va de visita
no sólo lo cansa la falta de oxígeno sino la adrenalina, la desesperación. Pero
los celestes estaban ya motivados para ganar.
No obstante se perdieron por lo menos cuatro goles que les hubieran
dejado la tranquilidad necesaria para disminuir las revoluciones. No obstante los wankas empatan de cabeza y el
partido se acelera a 180kph. Por ejemplo Chapita se ahogaba, Maxi se
minimizaba, Calca pedía chepa, entonces tuvieron que ser reemplazados por De la
Haza, Da Silva y el Pincel. Había que
regresar como sea con los tres points en casa.
El
fuelle de Piki…
El Turco le había ordenado a
Piki que se pegue a su línea defensiva como hace ya varias fechas, y sobre todo
que no se salga de ahí. Pero el yorugua-perucho Piki (¿ya sacó su DNI?) es hiperactivo
y no le gusta quedarse en un sólo lugar, es un obrerito que anda por todo lado arreglando
desperfectos. Parcha un hueco en la defensa y luego mete martillo en la
volante, ¿y si se necesita que alguien cubra las salidas? Ahí está el Piki con
su caja de herramientas para taponear las goteras. De ese modo, cuando vio que
sus volantes no quitaban ninguna pelota en la zona central decidió darles una ayudita, y como no es jugador estático, y al ver que
los delanteros no la metían, los acompañaba
en el ataque. Y así se mandó un par de veces a la carrera sin
pedir permiso a nadie pero se falló dos goles. ¡Ya pues, muchachos, no se
quejen!, está bien que Piki tenga tres pulmones pero no estemos esperando que
le salgan todas. ¡Qué tal fuelle el del Piki , tuvo aire como para avivar la llama de seis
parrillas juntas! No obstante, hay que
comprender que no todos tienen la misma vitalidad. Es que cuando se juega en
altura hay que saber muchas cosas: dosificar el oxigeno, darle a la pelota
rasante para que no se vaya a la tribuna, cuándo acelerar y cuando bajar las
revoluciones.
¡Carlitos,
píntalo a Pinto!...
No es noticia que un
perro muerda a un hombre pero sí lo es
que un hombre muerda a un perro. De igual modo, ya no es noticia que Loba meta
gol de tiro libre. Siempre la pasa de contrabando por encima de los
palitroques. Los arqueros ya saben que Loba la siempre la va a mandar por arriba
con una curva de plátano bellaco y de esa forma la coloca donde no llegan ni las arañas a poner sus huevos. Por
tanto, los sufridos arqueros la esperan allí arriba, a un ángulo superior,
derecho o zurdo. No sabemos por qué nos
vino a la mente la marinera que dice: “Moreno
píntame a Cristo”, y los hinchas celestes le cambiaron la letra: “!Carlitos, píntale la cara a Pinto”
Faltaban dos minutos. Loba
se cuadra frente a la chancha con la parsimonia de una tortuga sin importarle
que todos lo apurábamos. ¡Serenos!, para disparar hay que apuntar, y para
apuntar hay que cuadrarse bien. Loba mira, tasa, calcula y calza la bala mientras
los defensas ya se tapan las partes
pudendas. Loba se acerca, engatilla y los defensas ya se están volteando. Loba pone el pie y los
defensas se voltean por completo. Pero Carlitos cambia de parecer y la abofetea
para que corra a rastrón. Los defensas
saltan como si se hubieran espantado con un pericotito. Pinto se estiiiiira como
un chicle, se transforma en el hombre
eláaaaastico pero tarde, recontra taaaaarde, porque
la pelota tenía cita con los cáñamos y ya
se había metido por el rincón de las hormigas. Total, Pinto se quedó pintado de
celeste. Fue un truco de magia de
Yorhini en los pies de Loba en este fructífero año de su carrera, y con ello
los tres puntos se vienen a La Florida.
Gracias, Loba. Gracias
muchachos.
CODA:
La magia no se ha ido de La Florida: lo
que Yorhini (q.e.p.d.) hacía con las manos Pincel y Loba lo hacen con los pies.
LOBA 4EVER, CARAJOOOOO! HABER QUÉ JUGADOR DE GAYINAS Y KGONES HA METIDO MEJORES GOLES QUE LOBA!
ResponderBorrarbuena cronica pero se olvidan de piqui que se jugo un partidaso. tienen rason en lo de chapita y nunes porque ambos se ahogaron calca nola hiso. cosio tambien se jugo un partidazo pero loba la rompio. salud loba a hora que vengan los cagones
ResponderBorrarfelicitaciones manuel me gusto esta:
ResponderBorrarPero el yorugua-perucho Piki (¿ya sacó su DNI?) es hiperactivo y no le gusta quedarse en un sólo lugar, es un obrerito que anda por todo lado arreglando desperfectos. Parcha un hueco en la defensa y luego mete martillo en la volante, ¿y si se necesita que alguien cubra las salidas? Ahí está el Piki con su caja de herramientas para taponear las goteras.
jajaja que buena esta otra
Pero Carlitos cambia de parecer y la abofetea para que corra a rastrón. Y los defensas saltan como si se hubieran espantado con un pericotito. Pinto se estiiiiira como un chicle, se transforma en el hombre eláaaaastico pero tarde, taaaaarde, porque la pelota tenía cita con los cáñamos y ya se había metido por el rincón de las hormigas.
Como olvidar ese hermoso lobagol
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