Por Miguel López-Cano
Irven Ávila se reencontró con la senda del gol. Por ello mismo expresó su satisfacción de haber contribuido al triunfo celeste y que su alegría radica en que la gente salga contenta con la actuación del equipo. No tiene ninguna molestia y declara que en Huancayo el equipo va a salir a contragolpear.
Irven, gran actuación al igual que todo el equipo, un primer tiempo espectacular, ¿te vinieron bien esos dos goles, para agarrar confianza, luego de tu lesión, ¿Cómo te sentiste después del partido?
Cómodo, como lo que acabas de decir, para todo delantero es lindo regresar y anotar dos goles. Contento, además, porque el equipo está trabajando como quiere el técnico, mostrando que el equipo tiene una actitud importante y nuestra mayor alegría es que la hinchada se vaya contenta con este triunfo.
Ahora Cristal se va a Huancayo, plaza que conoces muy bien y donde la gente te quiere mucho, junto con el técnico Roberto, ¿qué piensas en lo que se le viene a Cristal?
Nada, tratar de ir a Huancayo y jugar como sabemos hacer, con la misma actitud. La plaza es difícil, pero nosotros tenemos lo nuestro. Por ahí esperar a que el equipo se mande con todo y contragolpear aprovechando los jugadores rápidos que tenemos ¿no? Es lo que vienen a hacer aquí los equipos rivales cuando juegan con nosotros, y bueno, nosotros vamos a hacer lo mismo en Huancayo,
¿En el segundo tiempo, los tres goles los confiaron demasiado? ¿Las órdenes de Roberto fueron de dosificar las energías? Porque hubo una gran diferencia entre el primer y segundo tiempo. Ya todo estaba resuelto, ¿no?
No, las órdenes fueron las mismas: “presionar, presionar, hay que meter la mayor cantidad de goles”. Pero este domingo hubo un sol tan fuerte al mediodía a todos nos jugó una mala pasada. Todos hicimos un gran desgaste en el primer tiempo, pero en el segundo las piernas nos comenzaron a flaquear. Reitero que las instrucciones del profe fueron las mismas: salir a presionar y convertir la mayor cantidad posible de goles.
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